Caries: qué son y cómo provenirlas

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Caries: qué son y cómo provenirlas

De entre todas las posibles enfermedades o problemas bucodentales, sin lugar a dudas las caries son las más significativas y las mejor conocidas. Y en nuestra clínica dental en Moncloa (Madrid) nos las podemos encontrar muy a menudo. Ahora bien, aunque tengan cierta resonancia, no todo el mundo sabe por qué se producen ni qué son. Y, en muchos casos, tampoco se siguen al pie de la letra los consejos más útiles para prevenirlas. Por eso queremos explicarte un poco todo aquello que tengas que saber sobre ellas para detectarlas y evitar que aparezcan en tu dentadura.

¿Qué son las caries?

Más que una enfermedad se trata de una zona dañada en algún punto de la superficie de los dientes. Más o menos cobran la forma de pequeños orificios, y están producidos por una variedad de factores, desde una higiene deficiente hasta una acumulación de ácido en la boca.

Generalmente se asocian mucho a los niños (e incluso los bebés pueden sufrirlas). Pero esto no hace que los adultos estén inmunizados contra ellas, todo lo contrario. Por lo que trata de seguir siempre una higiene adecuada.

En sí no tienen por qué ser graves, y esto lo atestigua lo muy comunes que son. Sin embargo, si no se tratan o corrigen a tiempo sí que pueden producir mayores incisiones en el diente, llegar al hueso y provocar dolores especialmente agudos y significativos en el diente.

¿Cómo puedes saber si las tienes?

¿Hay alguna forma de comprobar si estás sufriendo la aparición de una o más caries en tus dientes? Vamos a ver algunos factores significativos para detectarlas:

  • Agujeros visibles en los dientes. Que pueden tener, además, cierta oscuridad. En muchos casos son perfectamente visibles, especialmente si están en zonas más o menos frontales de los dientes.
  • Dolor en los dientes de forma constante. Al fin y al cabo, no dejan de ser heridas. En estos casos pueden haber llegado a profundizar algo más en el propio diente.
  • Dolor al comer cosas dulces, calientes o frías. Ya que todos estos factores inciden, precisamente, en la herida que te hayas hecho en el diente.
  • Sensibilidad dental. Aunque esto puede ser un síntoma de muchas cosas, también es una ayuda para detectar las caries.

¿Qué provoca la aparición de las caries?

Aunque podemos encontrar un único culpable (la placa) puede darse por diversas vías:

  • Azúcares. La placa es una especie de película que se forma alrededor de tus dientes cuando consumes mucho almidón o mucho azúcar. Se trata de una superficie bacteriana y, por lo tanto, es conveniente eliminarla. Ahora bien, generalmente el cepillado y la higiene regular son suficientes. Pero si descuidas tu limpieza, corres el riesgo de que se genere el sarro. Es decir: que dicha película se endurezca.
  • Ataques al esmalte. El esmalte es lo que protege y recubre tus dientes, es su protección. La placa, cuando se acumula en grandes cantidades y permanece bastante tiempo adherida a tus dientes, puede atacarlo, hasta el punto de provocar fisuras y, por ende, entrar en tu propio diente. Si sigue avanzando puede llegar a entrar en contacto con la encía, lo que producirá el dolor y la sensibilidad dental, tan sintomática.
  • Destrucción del diente. Ante una abertura en un diente, es más fácil que se produzcan caries. Principalmente porque este estará mucho más expuesto. Y lo mismo sucede si la placa se convierte en sarro y sigue agujereando el esmalte hasta llegar al hueso. Por lo tanto, es crucial evitar los golpes y tener una higiene adecuada.

¿Cómo puedes prevenir su aparición?

Como verás, librarte de estas heridas no es complicado, ni mucho menos. Solo requiere cuidados, atención y disciplina.

  • Cepillado constante. Después de cada comida, y acompañado del hilo dental.
  • Usar flúor. Busca colutorios o pastas dentales con una alta proporción en flúor. Así protegerás el esmalte.
  • El sellado dental. Es una técnica practicada por los dentistas, muy común. Es un pequeño empaste que protege las zonas abiertas y cavernosas de los dientes, para evitar que se acumulen ahí las bacterias.
  • Una dieta que no dañe tus dientes. Es decir: tratar de reducir el consumo de azúcares, refrescos y alcoholes.
  • Ir al dentista de manera regular. Fundamental, la mejor manera de detectar y corregir una caries siempre es con la ayuda de un profesional.

En definitiva, las caries pueden suponer un riesgo importante para tus dientes. Aunque en un principio sean comunes, esto no les resta gravedad. Por lo tanto, trata de seguir siempre las recomendaciones que hacemos los profesionales, como las que tenemos desde nuestra clínica dental en Moncloa (Madrid), y procura conservar tus dientes en las mejores condiciones posibles. Y no olvides hacerte una limpieza dental cada seis meses, más o menos. De esta manera te aseguras de eliminar bien todas las bacterias que pueda haber acumuladas en tu boca.

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